Fue una celebración única en el pintoresco pueblo pesquero de Lekeitio. Aunque actualmente residen en el Reino Unido, decidieron regresar a las raíces de Asier para celebrar su amor en un lugar lleno de significado.
Este evento fue particularmente especial, ya que el padre de Lara ha dedicado más de 50 años a la fotografía de bodas en Italia. Saber que tenía una gran responsabilidad en este contexto me motivó aún más a capturar cada instante con la mayor dedicación.
Los preparativos de Lara se llevaron a cabo en el Hotel Silken Palacio Uribarren de Lekeitio, donde las vistas a la playa y al puerto desde su habitación ofrecieron un entorno espectacular. Asier, por su parte, se preparó en la casa de su madre, rodeado de un ambiente familiar y cálido.
La ceremonia tuvo lugar en el ayuntamiento de Lekeitio, un lugar que respira cultura y tradición. Fue un momento muy emotivo, que reflejó el amor sincero de la pareja. Al ser una boda íntima, Lara y Asier pudieron disfrutar plenamente de la compañía de sus seres queridos.
Después de la ceremonia, exploramos las calles de Lekeitio para hacer algunas fotos de pareja. El ambiente era alegre y relajado, lo que facilitó la conexión natural entre ellos. Luego, llegamos al cóctel a tiempo para tomar más fotografías con los invitados y disfrutar de la deliciosa comida y bebida.
El banquete fue una experiencia tranquila y familiar, donde la pareja también tuvo el detalle de regalar pequeños obsequios a sus invitados, añadiendo un toque personal. Y cuando llegó el momento de la fiesta, se desató la alegría en el ambiente.
La boda de Lara y Asier no solo fue una hermosa celebración del amor, sino también un encuentro de culturas en un entorno lleno de historia y belleza. Les deseo toda la felicidad del mundo en su nueva vida juntos y que sigan creando recuerdos inolvidables.
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